KRYPTONITA (2011), LEONARDO OYOLA

El trabajo de guardia de un médico nochero en un hospital de Isidro Casanova parece marchar con normalidad hasta que un grupo de criminales irrumpe en el hospital y lo toman de rehén junto a una de sus enfermeras, pretendiendo que uno de ellos, que se encuentra en un estado grave, sea atendido y salvado. Pero eso no es todo, puesto que aun hay un detalle que convierte a esta trama en una historia todavía mucho más interesante. La banda de estos delincuentes no es cualquier banda, sino que se trata de la banda de Nafta Súper, cuyo líder es el moribundo al que pretenden salvar. Y resulta que los miembros de esta pandilla están caracterizados de manera bastante particular puesto que parecen salidos de las páginas de algunos cómics norteamericanos, aunque dotados con ciertas peculiaridades criollas. ¿Cómo es esto? Nos encontramos con un travesti llamado Lady Di (bastante parecida a la mujer maravilla), con el Ráfaga (una copia de Flash), el Faisán (similar a Linterna Verde), con un tipo bastante extraño y reservado llamado Juan Raro (una especie de Detective Marciano), con una paraguaya llamada Cuñataí Güirá (una parodia de la Chica Halcón), con un motoquero miembro de la policía federal llamado Federico (que resulta ser una reproducción de Batman) y con el mismísimo Nafta Súper, o el Pinino, (inspirado en la figura de Súperman). Todos estos personajes conforman, a su vez, una reproducción de La Liga de la Justicia, a diferencia de que estos son oriundos de la villa Los Eucaliptus, de una localidad de La Matanza, y son considerados criminales.

Leonardo Oyola ha hecho, en doscientas páginas, una fascinante readaptación a la argentina de los personajes de DC. Y, si bien el papel que le toca a la banda de Nafta Súper es el de los "tristemente célebres criminales", esta caracterización posee una significación que pretende tocar el fondo de una cuestión social: el criminal no es aquel al que le toca vivir en la marginación de una sociedad y defender a los suyos del avasallamiento del sistema, sino que, aunque a veces no lo querramos ver, el mal está también del lado de los que pretenden ser buenos y se encargan de reprimir al marginado. Esta crítica está presente a lo largo de todo el libro y es más evidente cuando vemos que los villanos de las historias originales están, en esta historia, del lado de los "buenos", de la policía, de la justicia. A su vez, este libro nos lleva por otros lugares propios de la realidad de la sociedad y la cultura argentina (más específicamente la bonaerense)

En el año 2015 se estrenó en argentina la película Kryptonita, dirigida por el director Nicanor Loreti. (Ver el rodando libros de Kryptonita)

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